La libertad es una de las cosas más importantes que puede tener todo ser vivo pero más aún el ser humano. Es muy difícil vivir sin aceptarse a uno mismo o recibiendo ofensas y agresiones por ser lo que eres. La felicidad empieza por vestir como se quiere, amar a quien se quiere, expresarse como se quiere…
Si una persona quiere hacerse un tatuaje se lo puede hacer, si una persona quiere hacerse un piercing también puede y por muy triste que sea, si una persona quiere suicidarse también puede. Pero eso solo pueden hacerlo las personas que están en plenas facultades.
¿Eutanasia sí o eutanasia no?
Hay personas que llevan en coma más de veinte años, personas con enfermedades degenerativas o personas con enfermedades sin cura. A estas personas les resulta más difícil llevar a cabo ciertas acciones.
Cuando una persona lleva en estado vegetativo demasiado tiempo, las personas que están emocionalmente relacionadas con esta deciden lo que sería mejor para ella. Y siendo algo más egoístas, lo que sería mejor para esas personas que sí son conscientes de lo que pasa, esas personas que sufren ese período de incertidumbre y no quieren dilatarlo más.
Cuando una persona es consciente de todo y puede comunicarse ya sea de forma verbal o no, pero no puede llevar a cabo cosas que querrían hacer, las cosas son más difíciles. ¿Es más libre una persona sana que una enferma? ¿Tiene más derecho a morir una persona sana? Hay personas que sufren durante mucho tiempo a causa de terribles enfermedades y piden una y otra vez que acaben con su vida, pero nadie las ayuda. Esa persona si pudiera hacerlo por sí sola lo haría, pero al estar limitada tiene que pedir ayuda, una ayuda que no se le puede dar porque hay una ley que la obliga a seguir viviendo. Esa persona no es libre para decidir cuándo quiere acabar con su vida.
¿Es ético negarle la ayuda a una persona que quiere acabar con su sufrimiento y agonía?
Madrid: Ciudad de sueños rotos