Recuerdo que no fui más que una mancha. Fui como una de esas que aparece en el Test de Rorschach, donde si lo ves de un lado soy malo, y si lo ves de otro, no tanto.
Al menos, eso fue lo que ella me dijo. Eso me hizo pensar bastante en lo que somos para las personas, en lo que muchas veces podemos convertirnos para alguien más, a veces algo malo, otras algo bueno. Algo que busca salvar a alguien pero que ese no busca para salvarse, Que difícil pues ver como te desmoronas y sentir que sin ti el aire se me va, pero para que para ti, yo no soy más que un olor a basura, un malestar que podría justificar tu desaparición de la paleta pública por unos dichosos 8 meses, o, que dichosos fueron.
Mirando en retrospectiva, me doy cuenta que para mi fuiste una obra de arte, algo más, fuiste sinfonía y arreglos, calor y pasión, y para ti, no fui más que algo pasajero, un mensaje en la botella de náufrago que se pierde en el mar desdichado de sus lamentos. Que horrible fue darme cuenta que mientras que para mi fuiste lo más especial, a ti no te interesó ni demostrármelo incluso cuando más lo necesitábamos.
Con todo esto, me puse a pensar en lo extraña que es la vida, y el efecto que podemos causar en alguien más, que mientras para nosotros es algo tan importante, hermoso, y bueno, para otras, no es algo más que un malestar que prefieren pasar. Supongo, que la perspectiva habla mucho en estos casos, “si te paras por aquí puedes ver lo que ella sintió” “pero, si te paras por acá, puedes entender porque ella hizo lo que hizo”…. Son excusas para las acciones, porque una persona que quiere a otra busca demostrárselos cada día que pasa, entonces, que difícil es saber que somos para alguien más, que difícil es no sentirse como una molestia para ti. Y, aquel que me lee podría entenderlo, podría entender y explicar de alguna u otra forma que sucede en la ente de la gente cuando es afectada positiva o negativamente por alguien más, y es que, si lo vemos simple, si me haces daño te hago daño, pero, y si te hago bien, ¿me haces daño?
Que dilema, ¿no lo creen? Cual es la reacción que tendrá tu efecto en ella, si solo querías hacerle el bien, a veces creo que podemos convertirnos en una mancha en la pared, incomoda, vistosa, hermosa quizás, pero a fin de cuentas, algo que que debemos volver a pintar.