Dedicatoria. Cada persona tiene su historia. Las personas que realmente están vivas no son las que disfrutan más, sino las que han sufrido de verdad. Las que saben el valor de las cosas, de la vida. Quienes han batallado más de una guerra, algunas victoriosas otras no tanto, pero aun así siguen desgarrándose el alma por vencer cada día.
Conocí personas capaces de consolar mientras esconden una lágrima, que te llevan de la mano por el camino de espinas y nos dan sus zapatos mientras llevan sus pies descalzos, que te muestran que, a pesar de las adversidades y tropiezo, la vida sigue siendo bella.
Para mis magnolias de acero
Ni Derechas ni Izquierdas. Los Mercados