Encerrado y solo en un lugar oscuro me encontré por más de 15 años de mi vida. Cuando decidí salir y conocer lo que me rodeaba, supe que había tomado la mejor iniciativa que lleno de temor me volvió un valiente.
En el momento que noté que no fui el único que había pasado por las tinieblas, firmemente dije que me dedicaría a superarme y dejar marcas en los corazones de todo el que pueda, motivar a una superación personal.
He visto una cantidad excesiva de personas quejándose, arrepintiéndose y deseando que su vida fuera de otra manera. Parece un poco paranoico que no ven brillar la luz que son.
No es que llegues a pensar que eres lo más grande de tu mundo, si eso llega a pasar, quiere decir que la ignorancia te ha llevado a cegarte y no notas que hay mucho más en el mundo. A lo que me refiero, es que debes amarte, cuidarte y darte todo el cariño que te mereces, hacer lo que te gusta y apasiona y mientras lo haces disfrútalo.
Toda tu vida está conformada por decisiones, vivencias, pensamientos, sentimientos, entre otras cosas, que complementan tu vida. Sin esto, tú no serías la calidad de persona que eres hoy en día.
Aseguro que si nos enfocamos más en soluciones y menos en los problemas, lograríamos tener una salud adecuada y una sociedad humanizada.
Reinvéntate; inicia de cero; cambia el plan, pero no la meta; gatea; camina; trota; corre; salta; haz algo. Por favor, no te quedes esperando que las cosas te caigan del cielo, porque lo único que cae del cielo luego de los fenómenos atmosféricos, son las bendiciones y ya las tienes.
Deja de hacer siempre lo mismo, de esa manera tendrás diferentes resultados. Sal de esa rutina y vive lo que no todos están dispuestos a vivir; una vida propia llena de historias que contar. La zona de confort es para los cobardes. Tú, ¿eres uno de ellos?